domingo, mayo 13, 2007


Cuando tu mirada se detiene en mi pensamiento, me interroga.
En realidad, siempre tu mirada me habla, me busca, y sobre todo me encuentra.
La profundidad de tus ojos tienen al amor como rehén, y tu alma viaja en ellos cada vez que me miran.
En cambio mis pestañas, que siempre me defienden tanto de lo extraño como de lo sublime, bajan mis tímidos párpados para que guarden esa imágen casi sacra, de dos esferas entreverdes, que reflejan la vida del hombre que amo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

SOS MUY PROFUNDA PARA ESCRIBIR, CUANDO ESTOY TRANQUILO ME DA GUSTO LEER TU POESIA, SEGUI ESCRIBIENDO..
FELICITACIONES.

myriam dijo...

hola fernando!!!!!!!!!
Gracias por aparecer en este rincón de mi existencia. y desde luego, gracias por tu respuesta.
espero verte seguido.
Un abrazo!!!!!!!!!!!!!!
Myr