martes, mayo 15, 2007


(Esta historia, la escribimos una tarde, de tantas tardes, entre loboestepario y yo; cada color indica la distinta autoría)
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El sol derramaba sus últimas gotas de sangre sobre el lago mientras yo esperaba sentada en un tronco viejo y tirado cómo me sorprendería el destino.
Un nombre rodaba en mis pestañas.....

Caminé y caminé sin rumo.... cansado y sin alimento
ese día me había despertado mi soledad, ese día era el que estaba esperando, mas no supe donde ir, así que recorrí el bosque entero buscando esa señal que me guiara…
A esa hora de la tarde......sentía por primera vez , que mi búsqueda estaba siendo en vano, pero algo me hacia seguir.....

La brisa de la tarde jugaba en mi pelo y la intriga, madre de la angustia, invadía mi voz
Un nombre....
No entendía el significado, ya que lo desconocido no se puede acariciar con las manos
Buscando abrigo en mis propios brazos y juntando las rodillas en mi pecho me decidí a esperar…
Los dados ya estaban echados.
De repente, dos dioses se asomaron: Eros y la Ocasión discutían tras de mí…

Ese sueño me desvelaba
Siempre fue así... desde hacia un tiempo atrás que no podía pensar en otra cosa
ese sueño era importante para mi y quería saber porque aparecía todas las noches con esos pensamientos.....
…perdí el rumbo, y vi con asombro que estaba a orillas de un lago
Ese lago ...que nunca había visto
No sabia donde estaba, pero de pronto.....y antes de que el miedo me invadiera....sentí que era una señal, y mi corazón latió con fuerza

Ambos dioses acordaron la hora de mi misión
Mi destino sería conducir “al enviado” hacia la Felicidad
Sentí un ruido...
Tomé mi caballo blanco y caminando lentamente me acerqué. Sus ojos firmes y sus labios temerosos se enfrentaron con mi presencia
Sin hablar le indiqué que me siguiera
Mi hogar en el bosque estaba algo lejos pero teníamos que llegar antes de medianoche para que él tome su poción
La intriga, asomaba en mi piel.

La seguí como ella me indico....
Todavía mis latidos sonaban como tambores en mi alma. Esa mirada....esos ojos inquietantes, esas flores en su pelo
Era ella!!! me dije
La había soñado tanto... que no podía confundirme
Sin hablar la seguí. Estaba apurada, por lo que percibía y no hice preguntas......solo el cruce de nuestras miradas dijo todo
Caminamos en silencio por todo el bosque mientras la luna nacía lentamente en el cielo
No apartaba mi mirada de ella..
Su porte al caminar, sus pies, todo el bosque se abría a su paso, y ella sabiéndolo.... era feliz
Caminamos así hasta que una luz apareció frente a nuestros ojos


La luz de la comarca nos iluminó de golpe, el cansancio se hacía notar a cada paso
Tras de mi, él me seguía sin mencionar palabra alguna. Me sentía observada, y seguro que él se sentía poseído por mi pensamiento.
Por primera vez, temí a los dioses: Eros es cruel.
Llegados a la comarca, los niños se acercaron para ver al hombre de tiernos ojos y figura esbelta. De mi hogar emanaba el reflejo del fuego.
El miró con asombro mi casa.
Un viejo árbol, tal vez el más añejo de todos, en el que até mi caballo indicaba los últimos pasos para entrar.
El silencio cada vez era más hondo, las miradas más profundas, mi respiración más ligera
Entramos, y había poca leña junto al fuego...

Lo primero que vi cuando entre.....fue ese fuego…
Ese fuego parecido al mío... al de mi corazón. Sentí deseos de tocarla.
Ella estaba de espaldas... junto a una copa. La copa dorada que también estaba en mis sueños, y supe en ese instante lo que significaba todo eso
Ella volteo con la copa en sus manos y la llevo a su boca. Yo la miraba a sus ojos, me encendía en ellos y por sus ojos....supe que esa copa era el entendimiento.
Bebí un sorbo y ese liquido caliente me invadió todo el cuerpo, iluminó mi mente, y al final pude hablarle, pero sin palabras...
"Te amo"; y caí en un abismo de oscuridad
(Continuará...)